Ser tan fuerte que nada pueda turbar tu paz mental.
Hablar solo de salud, felicidad y prosperidad a toda persona que conozcas.
Hacer que todos tus amigos sientan que hay algo de valor dentro de ellos.
Sentirse tan entusiasta con el éxito de los demás como con el nuestro.
Olvidar los errores y penas del pasado y aferrarse a los grandes logros que alcanzaremos en el futuro.
Brindarle a cada criatura viviente que hallemos a nuestro paso una sonrisa.
Sentirnos demasiado fuerte para preocuparnos, demasiado nobles para encolerizarnos, demasiado seguros para temer y demasiado contentos para pensar en dificultades.
Cuando la vida te presente mil razones para llorar, demuestrale que tienes mil y una razones por las cuales sonreir
No hay comentarios.:
Publicar un comentario